Los únicos regalos del mar son golpes duros, y ocasionalmente la chance de sentirse fuerte. No conozco mucho acerca del mar, pero sé que así es. Y también sé lo importante que es en la vida no necesariamente ser fuerte, sino sentirse fuerte. Medirse uno mismo aunque sea una vez. Encontrarse aunque sea una vez en las más primitivas condiciones humanas. Enfrentando la ceguera y la sordera solo, sin nada que te ayude excepto tus manos y tu propia cabeza.
3 comentarios:
Exije exije xD
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Sentirse fuerte al lado de las personas que quieres, porque
ellas son las que hacen que tus manos y tu propia cabeza sea fuerte.
Into the wild?
:)
Aunque no lo creas, lo importante, lo haces tú, tú me haces sentirme fuerte, haces que sepa que nada puede pararme.
Sube, nena, superLó te lleva volando hasta Alaska, hasta Uruguay, tú mandas...
Y el mundo está a tus pies.
Muá!
Ah, y gracias por arreglarme siempre.
Porque siempre estás ahí, llueva o nieve.
(:
Te quiero, Lú.
Gracias.
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